Desde 2016, el chef multi-estrella, Alain Ducasse, tiene casa propia en el Castillo de Versalles: toma las riendas del nuevo y elegante café contemporáneo bautizado Ore.
Es en el primer piso del magnífico pabellón Dufour, recientemente rehabilitado, que Alain Ducasse celebrará el arte de vivir en la francesa en este café con toque contemporáneo.
La idea de instalarse en el Castillo de Versalles es de proponer a los millones de visitantes seducidos por la historia de Francia y por su arte vivir, una cocina de tradición francesa elaborada minuciosamente.
Al margen de la visita por los esplendores de Versalles, se reencontrará en este lugar cálido, amistoso y goloso, donde podrá comer o hacer una simple pausa para tomar algo. En Versalles, el café contemporáneo Ore se añade al salón de té Angelina, instalado en las muros del Pabellón de Orléans desde hace muchos años.
Las verduras de los jardines del castillo en la carta
Del lado cocina, Alain Ducasse ya utiliza las verduras del jardín de la Reina del Castillo de Versalles, que sirve en la mesa gastronómica de Hotel Plaza Athénée *****. No hay duda que las verduras cultivadas por Alain Baraton - el jardinero jefe del Trianon y del gran parque de Versalles - se reencontran también en el menú del nuevo café contemporáneo Ore.
En el plato, descubra una cocina francesa ciertamente contemporánea, pero que busca su inspiración en los platos servidos en la época. Una verdadera experiencia culinaria que se vive en un lugar prestigioso que ha marcado la historia de Francia.
Ore... a la boca
La elección del nombre Ore no es casual, ya que significa boca en latín. Escogiendo este vocablo, Alain Ducasse hace un guiño a los placeres del paladar, pilar del arte de vivir a la francesa. Sin olvidar que en tiempos de Louis XIV, se hablaba de «la boca del rey», en referencia a la preparación de las comidas destinadas al monarca.
La noche, después de las visitas
Vuelta a una época más contemporánea cuando, después de las visitas, el lugar puede ser privatizado y convertirse en el escenario de las grandes cenas, como en los tiempos del rey. Una puesta en escena que evoca los faustos de antaño en los salones restaurados, hace vivir a los convidados una experiencia inolvidable en un marco único.