Paseo impresionista de Le Havre a Deauville

Para conmemorar el 150 aniversario del Impresionismo, te aconsejamos venir a primera hora a Le Havre, el lugar donde todo comenzó. Contempla la luz que se refleja en el agua desde el muelle, tal como lo hizo Monet al pintar "Impresión, sol naciente" en 1872, para admirar la luz reflejada en el agua desde el muelle. A continuación, cruza el estuario del Sena hasta Honfleur y Deauville, siguiendo los pasos de Boudin, Courbet y otros pintores impresionistas.

#1 Le Havre

El puerto de Le Havre es habitualmente el punto de partida para numerosos visitantes. Así que vamos a empezar aquí, en este lugar muy animado que tanto fascinó a Boudin, Pissarro y sus contemporáneos. Boudin, por lo general considerado como un pintor pre-impresionista, convirtió al Sémaphore, mirador de Le Havre, en un objeto de pintura (“Coup de vent devant Frascati, Le Havre”), mientras que Pissarro pintó 20 vistas del puerto durante su estancia en el hotel Continental, frente al muelle principal.

A dos pasos de allí, no podrás perderte el Museo de Arte Moderno André Malraux (MUMA) y su fachada moderna hecha de vidrio y hormigón. Dentro de esta luminosa galería se encuentra la segunda mayor colección de obras impresionistas de Francia, después de París. El museo ofrece un festival de colores con obras de Boudin, Monet, Renoir, Pissarro, Degas y Sisley, por citar tan sólo unos pocos, que abrieron la vía a otros artistas como Dufy, Friesz y Braque. No dejes de visitar el café del museo que ofrece unas vistas magníficas de las playas, el mar y el paseo. Este último, en ocasiones es conocido como “la Niza de Le Havre”, una especie de Paseo de los Ingleses del norte de Francia, y prosigue a lo largo de la playa hasta la localidad vecina de Sainte-Adresse, donde Monet pintó “Terraza en Sainte-Adresse”.

# 2 Honfleur

El cielo de Honfleur siempre ha tenido un algo especial. Boudin lo notó cuando captó el carácter cambiante de este cielo, él que era considerado “el rey de los cielos”. Puedes admirar su obra en el Museo Eugène Boudin, al cual legó más de 100 lienzos. Durante 15 años, sus amigos y él se reunían en la Ferme Saint-Siméon, una posada dirigida por la Madre Toutain. En la actualidad, este establecimiento es un restaurante de lujo y hotel de 5 estrellas donde podrás tomar una copa imaginándote los animados debates sobre el arte que tuvieron lugar allí. Honfleur es el lugar ideal para realizar un paseo alrededor del puerto histórico (el “Vieux Bassin”) hasta la iglesia de Sainte-Catherine y su campanario separado por dos naves. ¡Una verdadera imagen de postal!

#3 Deauville y Trouville-sur-Mer

Si quieres conocer las localidades costeras normandas tal y como lo hicieron Courbet, Boudin o Caillebotte, dirígete a Trouville-sur-Mer o Deauville, donde es fácil imaginarse a las mujeres del siglo XIX vestidas con miriñaques y los hombres endomingados. Prosigue tu recorrido artístico visitando el nuevo centro cultural de Deauville, Les Franciscaines, o paséate a orillas del mar y admira las impresionantes mansiones de la Belle Epoque, los hoteles y pintorescas cabinas de playa estas localidades costeras.

Ideas para una escapada impresionista:
Es en Normandía y en París, y en ningún otro lugar, donde podrás contemplar maravillosos cuadros impresionistas y vivir las emociones que inspiraron a estos artistas. Amantes de la naturaleza y de la modernidad, en el siglo XIX los impresionistas instalaron sus caballetes para retratar estas dos regiones: en los bosques y jardines, a lo largo del Sena y del Oise, en las costas normandas, en el corazón de los vibrantes barrios de modernidad de París… Estos paisajes, en su mayoría todavía intactos, siguen manteniendo la huella de los más grandes artistas y de sus herederos: Monet, Renoir, Degas, Manet, Morisot, Pissarro, Boudin, Caillebotte, Sisley, Van Gogh…
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