Ocio nocturno ininterrumpido

Las ciudades francesas ofrecen el escenario definitivo después del anochecer –los amantes de la noche pueden disfrutar de cócteles realizados con licores locales en discretos bares clandestinos, frecuentar bares en los que la cerveza fluye libremente o disfrutar de las incomparables bacanales de vino francesas. Las fiestas de alta energía duran hasta el día siguiente, mientras que los fines de semana hay festivales de música y danza para todos los gustos.

Ponga a prueba los límites de su resistencia.