¿Y si nos perdiésemos por los bosques de Mysterra?

Nos encontramos entre Angulema y Burdeos, muy cerca de los viñedos de Côtes de Blaye y del Médoc. En el interior del bosque de Montendre está situado el parque Mysterra: 11 hectáreas de naturaleza protegida con recorridos de laberintos que invitan a resolver enigmas o sencillamente a pasearse a orillas del lago Baron-Desqueyroux.

Aquí, todo es lúdico: si lo desea, el visitante puede utilizar su teléfono móvil para enfrentarse a unos enigmas que le ayudarán a avanzar por unos laberintos, aprovechando las pistas en realidad aumentada. Es un parque a descubrir en familia para disfrutar de una bocanada de aire puro y unas actividades que divertirán a grandes y pequeños. Estas son cuatro experiencias originales a vivir en el parque Mysterra.

El parque Mysterra se ha lanzado el reto de reinventar el laberinto: reales y virtuales al mismo tiempo, utilizando las tecnologías de realidad aumentada, los 11 recorridos están llenos de misterios. Lejos de los laberintos tradicionales formados por muros de matorrales, los de Mysterra utilizan el bosque sin desnaturalizarlo: unos recorridos naturales han sido trabajados por un paisajista para lograr que sean lúdicos. Cada uno de los 11 laberintos ofrece una experiencia diferente, orientada a descubrir la biodiversidad, el juego, el deporte o el arte.

Uno de los recorridos, denominado Mysterr’art, está dedicado al arte y a artistas contemporáneos que crean obras específicamente para Mysterra. Al realizar este recorrido, se descubren obras de un nuevo tipo, hechas con materiales tomados de la naturaleza, como una escultura de madera. Con un móvil o una tableta, los visitantes que lo desean accederán a todas las informaciones sobre la obra.

El recorrido Mysterressens sumerge al visitante en un apasionante descubrimiento de la fauna y de la flora locales. A lo largo de este laberinto, se descubren las ricas esencias del territorio, se toca y siente la naturaleza: ¡una experiencia inolvidable! La aplicación permite aprender muchas cosas sobre la biodiversidad presente.

En las 11 hectáreas del parque están ocultas unas piedras rúnicas, piedras erguidas con inscripciones grabadas. Al encontrar estas piedras o al fotografiarlas, los visitantes acumulan puntos y pistas que les podrán llevar hasta el tesoro. Según los guionistas del parque, es imposible de encontrar… ¿Estás dispuesto a enfrentarte al reto?