Dijon, capital de los Duques de Borgoña

La famosa plaza de François Rude, en Dijon.

Dijon, una capital radiante. Capital de un poderoso ducado de dimensión europea a finales de la Edad Media, Dijon posee hoy un patrimonio arquitectónico y cultural único, magníficamente conservado. El espacio protegido de Dijon, ciudad de arte e historia, ocupa casi 100 hectáreas y es uno de los más extensos de Francia. Desde julio de 2015, figura en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.

Qué ver en Dijon

  • La Cité Internationale de la Gastronomie et du Vin (Ciudad Internacional de la Gastronomía y el Vino): preservación del patrimonio de la región y arquitectura moderna son las señas de identidad de este lugar de intercambio dedicado al gusto y a la transmisión del saber hacer ancestral de la región. Cocina y enología se dan cita en este espacio cultural y gastronómico.
  • El Palacio de los Duques y de los Estados de Borgoña: a finales del sigo XIV, los Duques Valois de Borgoña transformaron el castillo ducal de Dijon en un fastuosos palacio que fue en parte reconstruido tres siglos después con la finalidad de acoger los Estados de Borgoña y que alberga hoy en día un museo.
  • La Tour Philippe-le-Bon (Torre Felipe el Bueno): construida a mediados del siglo XV, domina la ciudad con sus 46 metros de altura y representa el símbolo del prestigio y el poder de los Duques de Borgoña. Forma parte del ayuntamiento de Dijon.
  • La Chouette (la lechuza), emblemática de Dijon esculpida en la fachada norte de la Iglesia de Notre-Dame tiene la reputación de dar suerte siempre que se la acaricie con la mano izquierda pidiendo un deseo.
  • El Pozo de Moisés y la Cartuja de Champmol: a finales del siglo XIV, el duque de Borgoña Felipe le duc de Bourgogne, Philippe "El Atrevido" hizo construir en las puertas de Dijon una cartuja con el fin de acoger su tumba y la de sus descendientes. En el centro del claustro, el Pozo de Moisés, jefe de obra de la escultura medieval borgoñona.
  • Casas y hoteles particulares: Hotel Chambellan, Hotel de Vogüe, Casa Millière, Casa Milsand… casas de madera, con balcones o suntuosos edificios en piedra de Borgoña con sus famosos tejados con tejas esmaltadas... cada uno de estos edificios reflejan parte de la historia de la ciudad.
  • Las iglesias: desde la catedral de St-Bénigne a la iglesia de St-Michelan Miguel, pasando por Notre-Dame y su Jacquemart, estos admirables monumentos han profundamente marcado el paisaje urbano de Dijon, apodada "la ciudad de los cien campanarios". No olvides visitar la iglesia de Saint-Philibert, única iglesia románica de Dijon y antigua capilla de las novicias de la abadía de St-Bénigne.
  • Los museos: Museo de Bellas Artes, Museos arqueológico, Museo de la vida borgoñesa, Museo de arte sacro, Jardín de las Ciencias, Museo Magnin… todos ellos testimonios de la historia de la ciudad de los Duques, muestran todos los aspectos culturales de la capital borgoñona.
  • Para los amantes del arte contemporáneo: Le Consortium. Activo desde hace 35 años y catalogado como Centro de Arte en 1982, este centro tiene como objetivo la producción y exposición de obras contemporáneas, el enriquecimiento del patrimonio público, la promoción, difusión y la formación en el arte como pensamiento de hoy en día. Obras de Lily van der Stokker, Jean-Luc Godard, François Pompon, Rachel Feinstein, Cindy Sherman, Christian Boltanski o Yang Pei Ming... se exponen entre las de otros artistas.
  • Los parques y jardines: Jardín Darcy, el Parque de la Colombière… Dijon no es únicamente una ciudad de piedras, posee además 700 hectáreas de parque y jardines, privados y públicos. Podrás apreciar una armonía entre la arquitectura y la naturaleza, que traduce maravillosamente el arte de vivir que Dijon ha sabido desarrollar y cultivar a lo largo de los siglos.

Una lechuza para descubrir Dijon

Explorar el "Parcours de la Chouette" (recorrido de la lechuza) puede ser una experiencia a pie, acompañado de una visita guiada o incluso en Segway. Los visitantes tienen varias opciones para disfrutar de este itinerario.

El itinerario de la lechuza: el "Parcours de la Chouette" desvela los secretos del casco antiguo por etapas. La Oficina de Turismo ha añadido 3 nuevos circuitos: Jean-Jacques Rousseau, Zola y Moïse. Más de una docena de paradas adicionales ofrecen al visitante la posibilidad de profundizar en los barrios más bellos de la ciudad.
Visitas guiadas: la Oficina de Turismo de Dijon ofrece durante todo el año una amplia gama de visitas: "Dijon, Découverte", "Saveurs et Piquants", "Le Palais des Etats"... "Autour des Halles...Le Marché" y "Des Bourguignons connus et méconnus".
Paseos en Segway: descubre Dijon en estos vehículos futuristas. Una forma original, fácil e intuitiva de descubrir Dijon... solo, en familia o con amigos... con un guía.

Qué comer en Dijon, capital gastronómica

Mundialmente conocida por su alta gastronomía y por su arte de vivir, Dijon es además la puerta de entrada a los más importantes viñedos de Francia: la Cote de Nuits y sus vinos de renombre mundial. La reputación de su ruta de los Grandes Viñedos le ha valido el apodo de Champs-Elysées de Borgoña.

  • La degustación de productos tradicionales: la mostaza, pan de especias, crema de cassis o el vino… La gastronomía de Borgoña es famosa en todo el mundo: una delicia permanente para los visitantes de Dijon.
  • Circuitos de los viñedos: la reputación de la Côte de Nuits es fruto de los viñedos de renombre mundial. De Marsannay-la-Côte, «Porte d’Or de la Côte de Nuits» a Nuits-Saint-Georges y pasando por Gevrey-Chambertin y sus prestigiosos cosechas (chambertin-clos-de-bèze, latricières-chambertin…), podrás encontrar algunos de los mejores caldos del mundo: romanée-conti, corton-charlemagne, clos-des-lambrays entre otros…
  • Los Climats del viñedo de Borgoña, patrimonio mundial de la Unesco: Dijon cuenta con dos reconocimientos del Patrimonio Mundial de la Unesco, por un lado, la zona protegida de la ciudad, una de las mayores de Francia, forma parte integrante de la zona Climats du vignoble de Bourgogne, que es Patrimonio de la Humanidad desde julio de 2015. Por otro, la Cité Internationale de la Gastronomie et du Vin, cuyo objetivo es promover la comida gastronómica de los franceses, incluida en la lista del Patrimonio Inmaterial de la Humanidad desde noviembre de 2010.

Cita en Dijon, en Borgoña